5.4.06

Hay que satisfacer a la hinchada.

Pero no te vayas a enojar que tú no estás tan hinchada, mi Nega. Lo que pasa es que, siendo tú la única -casi única porque eventualmente algún perdido chequea esto y sólo una vez la China dejó su huellita-, te he nombrado presidenta del club de fans de Andando sin zapatos. ¿Qué tan importante puede ser a nivel blogósfera? Imagino que tanto como el FIM de Olivera para las presentes elecciones, pero eso no importa. Para mí, eres la namber guan.

Soy un flojo, eso es lo que pasa. Ya debería tener título profesional en la especialidad. Hasta para lo que me gusta hacer puedo dejar lugar a la flojera. Desde el 20 de marzo no posteo y me ha causado remordimientos, pero con la flojera al costado. Soy un caso.

Lo de la agencia anda ahí, en plena fase de parto. Y es un parto lento y duro. Yo pongo el hombro pero igual hay cosas que se demoran porque tienen que ser así. Y eso aburre. La zona es muy buena. Está la universidad Cayetano Heredia muy cerca -obviamente el hospital también-, y la Av. Honorio Delgado hierve de actividad comercial. Hay farmacias, policlínicos, restaurantes... hay de todo. Varias funerarias. Justo, a unas cuantas casas de donde estamos, hay una bien organizada, más o menos grande, con tres, si conté bien, unidades de transporte. A veces, me he cruzado con los ataúdes saliendo del local. Vacíos, seguramente. Pero estremecen igual. De qué color será el mío.

Me han contado en casa de mi mamá que los libros que pedí con mi cuento ya llegaron, directo de Argentina. El domingo, luego de las elecciones, voy a almorzar por allá y los voy a ver. Cierta ansiedad me brota, pero ahí nomás. Hablando de mi mamá, hace dos días se dio un tropezón en el Sabogal, yendo hacia el laboratorio para unas pruebas que le mandaron, y se sacó la ñoña. Se dio un tropezón que la tiró al piso con violencia y le hizo volar sus lentes y romper su plancha de dientes. Tres dientes de ella se rompieron. Se le rajó el labio y ya me ha contado que se moreteado y que le duele cuando se ríe. Me pegué un sustazo cuando mi hermana me contó por mail porque creí que se había roto algo. Es común que, con ese tipo de caídas, termine rota la cadera o la pelvis, zonas que son difíciles de recuperar en personas mayores. Bueno, mi mamá no es revieja pero ya está en los 60´s. Por suerte, está mejorando.

Y parece que yo también. Me refiero al blog. Será hasta la... ¿próxima?

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Ta ke Educito... no se si tomarlo como un honor o te estás quedando conmigo tio !!!??? jajajajaja. Que malo eres!!! nombrarme presidenta! Es que te cuento tambien lo soy del Club de Piratas... siiiiiiiiii, allí pertenecen a ese cluf mi sobrino paquito y un amigo cieguito que es la muerrrrrte, nos cag. de la risa y en este club solo ingresan los que realmente SOMOS PIRATAS pes.. tu entiendes verdad ??? jajajjaaj. Gracias de todos modos por la distinción cariño y trataré de hacer méritos para que no te arrepientas, ya sabes que sigo siendo tu fan namber guan... jijijij

abril 10, 2006 12:24 p. m.  

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